martes, 26 de abril de 2016

Carlos Pauner en Añón


El pasado sábado 23 de abril, fue un día especial para Añón, donde un numeroso  grupo de personas acudieron a presenciar el proyección del documental “Everest.Último ochomil”, de Carlos Pauner.



            Entre ellas se encontraba una representación del Club de Montaña de Borja, con su Presidente D. Fernando Martínez Gómez y el Concejal Delegado de Deportes D. Daniel Boldova Irache.




            No faltó tampoco una de sus más entusiastas seguidoras, Dª María Ángeles Martínez que nos ha enviado las fotografías que ilustran este artículo, así como una apasionada crónica del acto.



 “Al término de la proyección Carlos subió al escenario y mantuvo una charla distendida con todos los presentes que le preguntaron por su trayectoria alpinística, por sus proyectos actuales y  por su fundación, entre  otros muchos temas de interés, a lo que él respondió con la amabilidad y sencillez que le caracterizan pero ante todo, desde su propia experiencia acumulada, por todo lo vivido en un mundo hostil como es la montaña en el que hay momentos de andar por la cuerda floja , entre la vida y la muerte, un mundo que no perdona en las alturas donde la fuerza mental impera ante la fuerza física”.



“Volvió a abrirnos los ojos para mirar lo que tenemos en nuestra comunidad, a nuestro  alrededor y aprender a valorarlo. Nos inyectó esa dosis de entusiasmo para perseguir nuestros sueños por pequeños que sean con constancia y trabajo. Hay que marcarse objetivos en la vida y perseguirlos hasta el final para poder disfrutar felizmente de los retos conseguidos.
Su lenguaje, sus palabras y todo su ser no pueden ser más reales, factores que nos ayudan fácilmente a pensar y recapacitar sobre lo que nos quiere transmitir y llevarlo a cabo”.



“Hace tres años que Carlos Pauner culminó el gran sueño de su vida: coronar las 14 montañas más altas del planeta y desde hace tres años, podemos disfrutar con gran fortuna de su presencia en el día de Aragón, San Jorge, entre nosotros.
Cuando le tocó estar  a miles de kilómetros, en algún campo base situado al pie de los gigantes de la tierra en pleno corazón de las cordilleras del Himalaya o Karakórum, no pasó por alto ni un solo 23 de abril sin escribirnos, sin escribir a su tierra, a sus gentes con pasión por su Aragón”.




            En la crónica que, con motivo del Día de Aragón de  2005, Carlos Pauner envió desde el Everest, afirmaba: “Poco a poco, hemos terminado con este suculento festín. Mientras apuramos las últimas gotas de un buen caldo aragonés, en compañía de nuestros amigos mallorquines, hacemos un brindis en recuerdo del gran Reino que fuimos. Nuestro singular rockero Tafalla, puesto en pie, se arranca con La Magallonera. Nos emocionamos por unos instantes y, de golpe, dejamos atrás las grietas del glaciar, el frío intenso que nos ha maltratado estos días y los miles de metros que aún nos quedan por pelear. Mañana nos ocuparemos de esos problemas. Hoy estamos felices, orgullosos de la sangre aragonesa que corre por nuestras venas y convencidos de que aquí, en el techo del mundo, seremos un ejemplo de tesón, nobleza y fuerza, cualidades de todos los hombres y mujeres de Aragón.”
            Ahora, diez años después, ha podido celebrarlo en Añón y con sus amigos de Borja, en una jornada que quedará para siempre grabada en el recuerdo de quienes tuvieron la oportunidad de disfrutar con su compañía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario