miércoles, 30 de marzo de 2016

Increíble manipulación


            Dentro de poco más de un mes, la Virgen de la Peana volverá a recorrer las calles de Borja, presidiendo el Rosario de Cristal y despertando el entusiasmo de los borjanos que la tienen como Patrona.




            Su entrada en la antigua colegiata de Santa María, entre vítores y aplausos constituye un momento de especial devoción, pues junto al significado religioso del acto, la Virgen es también una de las principales señas de identidad de la ciudad y un símbolo del patriotismo local.
            Por ello, nos ha causado profunda impresión encontrar en youtube varios vídeos, colgados hace siete años, por una persona que utiliza el “nick” o seudónimo de “soydeborjaynomepena”.

            En ellos, a partir de imágenes ya antiguas, aunque correspondientes a una entrada real de la Virgen, se lleva a cabo una burda instrumentación política, al ser dotadas de un fondo musical y de textos escritos, cuya valoración dejamos al criterio de nuestros lectores.
            En uno de ellos ( https://www.youtube.com/watch?v=SyEdRNf-wFQ ), lo que suena es el “Eusko gudariak”, el himno al soldado vasco y en el momento de ser colocado el trono de la Virgen en el presbiterio, en lugar de los vivas que le dedican siempre sus hijos de Borja, se escuchan otros completamente improcedentes.
            La mismas imágenes son utilizadas para otro vídeo en el que sitúa a nuestra ciudad en los “Paisos catalans” (https://www.youtube.com/watch?v=nsKHrMcMDXo ), mientras la Virgen entra al compás de Els segadors. Aquí, entre los gritos que se escuchan hay uno que, probablemente, podría ser tipificado como apología del terrorismo.
Todavía hay otra versión (https://www.youtube.com/watch?v=fh6PXc9KjvE ), en este caso con la música del Canto a la libertad de Labordeta.
Ante hechos como los que estamos comentando, en los que la manipulación alcanza hasta lo más sagrado, cabe la postura de silenciarlos pero también es conveniente que se conozca lo que son capaces de realizar algunas personas que no se esconden en lejanas montañas o remotos lugares sino que, probablemente, se encuentran más cerca. Por otra parte, es conveniente recordar que la libertad de expresión, también tiene un límite, mientras que el marco constitucional y el ordenamiento jurídico vigente no dan cabida a la apología del terrorismo en el que podría haber incurrido uno de los citados vídeos.

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